Pensativa en el cristal,
vas deshilando la escarcha.
No sabes que son tus dedos
el telar de la mañana.
Al calor de tu memoria
cae la tarde fugitiva,
allí donde rompe el viento
su vieja guitarra herida.
Pasas las páginas lentas
del invierno por sus calles
y ocultas entre las horas
la luz muerta de los ángeles.
***
ESTRELLA
Ánfora rota de escarcha
entre las ramas en vilo.
Temblor de cielo desnudo,
de noche antigua y destino.
Entre las ramas la estrella
derrama su larga muerte
y se vacía en su símbolo.
(De Cantigas y cárceles, Isla de Siltolá 2011)