viernes, 15 de junio de 2018

TeX y Cuaderno Ático

Puede resultar paradójico que la producción de una revista de poesía le deba tanto a un matemático y teórico de la computación. Pero con cada número de Cuaderno Ático no puedo dejar de expresar mi agradecimiento a Donald Knuth por su maravilloso sistema de tipografía digital TeX, cuyo nombre tiene, por cierto, un intencionado origen griego. Knuth, uno de los padres de la informática tal y como la conocemos (y usamos) ahora, pero además un humanista de tomo y lomo, rara vez es fotografiado junto a un ordenador. Aunque también dijo en el breve discurso pronunciado cuando le dieron aquí en España el Premio BBVA Fronteras del Conocimiento (2010. Enlazo el vídeo más abajo, que es cortito): «Es sumamente emocionante imaginar cómo bailan los electrones en el interior de una máquina cuando está llevando a cabo operaciones.» He de confesar que yo también suelo sentir, peligrosamente, esa emoción. Cada vez que TeX comienza a ejecutar una compilación y aparece en la pantalla la mítica frase: "This is TeX, version..." es como asistir a un pequeño big-bang en la oscuridad, algo que empieza a moverse, vivo, en el negro fondo de la terminal. Y ver cómo esos electrones van recordando a Gutenberg para crear letras, espacios, renglones, versos, páginas, etc. Y cómo cada texto va renaciendo a la luz. Sí, caray, es de veras emocionante.